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Militante del Frente Patria Grande, Ofelia viene de las luchas estudiantiles (fue presidenta del Centro de Estudiantes de la Escuela Secundaria Carlos Pellegrini) y del movimiento feminista. En el año 2019 fue candidata a legisladora por el Frente de Todos en las elecciones de la Ciudad de Buenos Aires, donde resultó electa, convirtiéndose en la legisladora más joven en Latinoamérica. Además de su intervención completa, compartimos algunas de las ideas que dejó en la charla “Animarse a otra politica para construir otro mundo”.
Otras intervenciones de la charla
“Muchas veces los miedos del presente son proyecciones del miedo a asumir nuestros propios fracasos. Estamos en tiempos muy difíciles, con problemas muy grandes. Sumergidos en ese malestar, el impulso de asociar casi automáticamente el descontento de mucha gente con la antipolítica como una respuesta ideológica y conservadora me parece que es un primer error. Hay que revisar que hizo la política antes, afinar la capacidad de escucha para entender cómo llegamos hasta acá. Dejar de intentar recuperar la política en abstracto o de defender las instituciones por costumbre, y pensar cómo carajo vamos a recuperar la posibilidad de proyectar una vida feliz: con sueños nuestros y de otros. Una vida digna. Porque el desafío del presente no es ver quién responde al momento que atravesamos con el discurso más estridente o impactante. Hay que volver al pragmatismo de resolver problemas concretos, sobre todo en Argentina. Esa, creo, es una de las primeras claves para empezar a pensar”.
“Prefiero dar una pelea y perderla que vivir calculando y especulando derrotas para no hacer absolutamente nada”
“No va a haber justicia social ni distribución de la riqueza sin pelearse un poco. Y por eso hablo de autoestima. Porque yo prefiero dar una pelea y perderla que vivir calculando y especulando derrotas para no hacer absolutamente nada. Entonces, además de ciudades sin miedo, necesitamos gobiernos sin miedo. O hay gobiernos sin miedo o hay gobiernos cobardes que en la historia no significan nada. Y así como necesitamos gobiernos sin miedo, necesitamos militancia con esperanza. Con imaginación, con expectativas y exigencias. Lo mejor no pasó. Me niego a creer eso. Lo mejor está por venir”.